miércoles, 2 de diciembre de 2015

Once Onzas

ONCE ONZAS
Carrera 16A No. 76-12, Bogotá

Fecha: 14 de noviembre de 2015
Asistentes: Mery, Yolima, Yennifer, Catalina, Lina, Belkis, Jennyfer, Martha, Rocío, Ana María, Lity, Natalia y Pamela.


Ubicado a dos cuadras de la estación de transmilenio de la calle 76, este es un pequeño restaurante que ofrece a sus clientes suculentos desayunos y deliciosos almuerzos a módicos precios.  Este día por fin todas las chicas del grupo nos encontrábamos reunidas, 13 en total… sin contar, claro está, a los dos hombres que se infiltraron en nuestra reunión: el chef y su hermano. El primero se llama Alejandro y es, de acuerdo con la chica con más años de experiencia dentro del grupo, todo un bombón. Es un gran cocinero, con un buen desempeño tanto en lo dulce como en lo salado, y una gran disposición para atender a los comensales a la mesa con paciencia y amabilidad. El hermano del chef, otro bombón de ojos azules, resultó en nuestra cita dada la cercanía del restaurante a su trabajo… o eso dijo, vaya uno a saber si no iría buscando alguna otra cosa, o dama, que se le hubiera perdido.


Varias mesas fueron unidas en el fondo del restaurante para forma un gran comedor en el que pudiéramos sentarnos todas juntas. Muy puntuales fuimos llegando y comenzando a echar chisme como si no hubiera un mañana para volvernos a encontrar. Las carcajadas volaban por aquí y por allá, y de repente, empezaron a llegar los platos de comida. Vale la pena aclarar que esta vez el plan era de almuerzo, pues el restaurante no ofrece servicio de cena. El chef Alejandro tenía preparado para el harén de chicas una serie de platos con varios tipos de carnes, papitas criollas y trocitos de chorizo. Además, suministró varias porciones de ensalada, con una vinagreta muy deliciosa debo reconocer. Cada chica tomaba la porción que deseaba de la picada y disfrutaba del almuerzo. Solo con la comida en la boca llegaron a cesar las risas… y menos mal, porque los otros comensales que entraban al restaurante empezaban a encontrar extraña esa reunión tan peculiar de tantas mujeres de tantas generaciones. Sencillo pero muy bien preparado, el almuerzo, que estuvo acompañado de jugo de fruta natural o limonada, con azúcar o sin azúcar para todos los gustos, fue todo un éxito.

Todas parecíamos estar satisfechas, pero a la vista del postre, los jugos gástricos hicieron sus labores y destinaron un espacio adicional en los estómagos para la delicia que se aproximaba… y con delicia me refiero a la torta que traía el mesero, no al mesero en sí como algunas bien podrían considerar.

Nuestro querido chef había preparado un cheesecake con salsa de ruibarbo, y para todos aquellos que desconozcan esa vaina, el ruibarbo es una verdura de tallo comestible de la cual, no me pregunten cómo, el delicioso… perdón, el chef, logro sacar una salsa muy rica. Tan bueno estaba el postre que no hubo tiempo ni pa’ esperar el tinto, los platos quedaron limpios y relucientes, y las chicas bellas y sonrientes después de tan grato almuerzo. La única observación que tengo al respecto es la siguiente: yo personalmente, la bella dama que escribe este artículo, soy muy buena para el dulce, y el postre me encantó. Sin embargo, noté que algunas de las otras damas encontraron la sobremesa un tanto dulce, por lo cual le sugeriría al chef, con toda la humildad que una damisela de paladar poco fino, que complementase su plato con algún sabor que le bajara un poco la dulzura al postre.

Con barriga llena y corazón contento, algunas de las damas debieron irse a atender otras actividades y dejaron el recinto… pero así como salieron unas, entraron otros, entre esos un caballero que llego a irrumpir la paz femenina que se respiraba en el aire… aunque debo reconocer que nos hizo reír y pasar un buen rato.

Estoy muy contenta de haber compartido con las chicas, y algunos chicos metiches, en Once Onzas, el restaurante de Alejandro Correa. No es un restaurante con luz de velas ni meseros encorbatados, sino con luz de bombillo y mesero-cocinero multiusos; no es un restaurante para ir a comer carne a la no sé con sí sé cuantas, pero sí un lugar muy agradable para disfrutar una comida casera con un toque de finura, preparada por un chef casero con un toque de dulzura.

Muchas gracias y que se repita.


Calificación: 4,5/5

viernes, 2 de octubre de 2015

KATHMANDU

KATHMANDU USAQUEN
Cra 6a con 117. Bogotá.

Fecha: junio 12 de 2015
(Tercera salida de Chicas)

Asistieron: Belkis, Catalina, Rocío, Lina Vanesa, Litty y Jennyfer

Restaurante poco espacioso pero con opción agradable de disfrutar el show, que puede verse como una mezcla de culturas orientales.
Ambientado con diversas figuras que no logramos identificar (¿budas, diosas hindúes?), aun consultando al personal de servicio. Mucho color rojo, telas, encajes, y ambiente a media luz.
De la misma forma, los platillos son una muestra sabrosa de diferentes cocinas, bien presentados; principalmente comida árabe. La atención fue diligente y oportuna.

Kathmandú no posee una identidad gastronómica definida, sin embargo, las bebidas elegidas fueron todas de tipo natural, que con nombres exóticos resultaron muy agradables al paladar.

Llamó mi atención el bailarín, quien sin ser nativo oriental interpretó muy bien su rol, nuevamente mezclando diversos estilos difíciles de identificar ( su origen).

Los precios son cómodos + Cover de $10.000.

Lo califico con: 3.7 / 5


NN

Restaurante: NN
Fecha: abril 17 de 2015
Ubicación:  calle 71 # 5-56, tel 2553252, cel 321 4339759
* Importante hacer reserva
Plato recomendado: Beef Wellington
Precio: $ 80.000 
Servicio: excelente
Asistimos: Belkis, Catalina, Yolima, Lina, Jennifer, Yenifer, Ana María y Natalia 

NN fue el segundo restaurante de nuestras salidas y ha sido uno de mis favoritos, no solo por la comida y el chef (Nicolás de Zubiría) sino porque el día que fuimos yo estaba de cumpleaños y me encantó haber podido compartir con mis Chicas ese gran momento.
Para empezar les cuento que la llegada no fue tan obvia como a los otros sitios. No hay un letrero que diga "Restaurante NN" como esperábamos sino una casa muy casual con un letrero "dañado" intencionamente para que solo destaquen 2 "N" que le dan el nombre al restaurante.
Se ingresa por una tiendita de ropa y accesorios poco comunes, y posteriormente nos condujeron por una puerta a través de la cocina hasta el interior del local... ahí empieza nuestra gran experiencia. 
El restaurante como tal tiene un ambiente romántico y elegante. El servicio fue bueno y los platos mejores!!! De lo que pedimos ese día recuerdo y recomiendo 100%, el beef Wellington (plato muy reconocido del sitio), muy muy rico. Para acompañar la comida nos llevaron papitas, ensaladas y otras delicias que degustamos inclusive sin saber qué eran! Todo estuvo exquisito... y lo mejor el postre, pedimos 2 y 8 cucharas para poder compartir!!
Pienso que el ambiente fue muy agradable, había música al principio y posteriormente pianista en vivo! Pudimos hablar como tanto nos gusta peeeeero nos dio mucho frío por el aire acondicionado. 
De los precios qué les puedo decir... $80.000 por persona aprox. 
Parqueadero de los que hay por ahí cerca en la zona.
Lo mejor de todo... poder ver a Nicolás de Zubiría así fuera muy de lejitos y solo la calvita jejejeje
Fue un gran día, lo disfrute mucho, ojalá repitamos alguna vez... porque qué maravilla!!. Le doy un 4,5/5 :)

jueves, 30 de julio de 2015

LA HAMBURGUESERÍA

Restaurante La Hamburguesería

Este restaurante fue la primera salida formal de nuestro grupo.  Esta se realizó el dia 6 de marzo de este año. Fue el punto de inicio, de lo que yo aspiro, sea una experiencia que acompañe nuestras vidas durante muchos años, pues no solo fortalece lazos familiares y de amistad, sino nos permite vivir divertidas experiencias gastronómicas. Asistimos: Catalina, La Mona, Jennifer, Ana Maria, Belkis y yo, Este restaurante fue escogido por la estrecha relación que existe entre la hamburguesa Angus que venden allí y nuestro grupo.

Localizado sobre la calle 85 con carrera 13, costado sur. Es un restaurante de instalaciones amplias y cómodas, con una carta bastante surtida no solo de hamburguesas, sino de platos de diferentes carnes e incluso ensaladas. Trato de hacer memoria sobre los platos que pedimos, pero la verdad la memoria no me quiere ayudar. Recuerdo bien que la hamburguesa Angus, que varias ordenamos, estaba  bien preparada y bien presentada. Creo que aquí voy a tener que pedirle ayuda a las compañeras de grupo, para que hagan sus comentarios sobre la calidad de sus platos.

En general es un restaurante bien presentado, con una atención aceptable por parte de los meseros, comida agradable, con una variedad que satisface diferentes gustos y todos los apetitos. Los precios oscilan por plato entre los $25.000 y $35.000. No tiene parqueadero propio.

Desafortunadamente, la calificación no puede ser muy alta, debido al alto volumen de la música que no nos permitía conversar. Y esto para nuestro grupo es tan importante, como la comida misma. Por esta razón, a mi modo de ver, saca un 3.5

Sin embargo, sea como sea, La Hamburguesería, independientemente de su calificación, tiene el honor de marcar el inicio de un grupo maravilloso, que ha ido aumentando en número de miembros y en vivencias, no solo de carácter gastronómico, sino como esta misma, de tener que aprender a meterse a un blog a hacer una entrada. Gracias solo chicas!!



martes, 28 de julio de 2015

KEIKO



Keiko. Tipo de comida: oriental.
Ubicación: Centro Comercial Cafam Floresta.
Fecha de la visita: 25 de julio 2015
Hora: 7 p.m.
Asistentes: Rocío, Natalia, Catalina, Jennyfer, Yolima, Lity, Lina y Belkis.

Este es el restaurante n° 4 que visita el grupo Solo Chicas. Como de costumbre salimos a charlar, adelantar el cuaderno, reírnos y compartir un rato con las amigas.  En esta ocasión escogimos la modalidad Tepanyaki en la cual el chef prepara los alimentos sobre una plancha instalada en la mesa donde se van a consumir. Las comensales quedamos sentadas frente o al lado de esa plancha y apreciamos el procedimiento, él se lució con malabares de herramientas y corazones de huevo y arroz. Todos los platos, con extraños nombres, fueron servidos con el mismo arroz y verduras calientes, la diferencia la ponen las carnes, pollo (y pescado), frutos del mar (y pescado) y lomo de res (sin pescado). Acompañamos con limonadas de lichi, yerbabuena y la tradicional; con  poco o nada de azúcar, por aquello de la dieta.

Este es un lugar tranquilo, el volumen de la música permite conversar lo cual es clave en nuestros encuentros, la atención es esmerada y nos dieron gusto con las selecciones y adiciones que pedimos.
Me llamó la atención que: no estaba lleno el restaurante; Luis, el chef, tenía un ojo morado; nos tuvimos que parar porque comenzaron a hacerle aseo a la plancha y el tv solo transmitió fútbol.

Costó: $33.000 persona, el parqueadero es dentro del centro comercial y al pagar se muestra la factura o una copia sin son varios los que tienen carro, y sale más barato.
¿Volvería a este restaurante? Sí, de hecho estaba repitiendo.
Calificación: 4/5.


sábado, 25 de julio de 2015

Se inicia la cata !



Somos un grupo de chicas, amigas, hermanas, primas, 
cuñadas, vecinas y socias, que disfrutamos de compartir experiencias gastronómicas de todo tipo. "Foodies"

En este blog comentamos nuestras experiencias.

¡Bienvenidos!

Sede principal: Bogotá D.C.- Colombia 

"Aunque los dos términos a veces se usan como sinónimos, los foodies se distinguen de los gourmets en que los gourmets son aficionados con gusto refinado que pueden ser profesionales de la industria de comida, mientras que los foodies son amateur, amantes de la buena mesa, a los que simplemente les encanta la comida por su consumo, estudio, preparación y noticias." 
Tomado de: https://es.wikipedia.org/wiki/Foodie. Consultado ene 17/2016.